El día jueves 19 de mayo en la Facultad de Ciencias De la Comunicación (FCC) se realizó la presentación de un informe de relevamiento de consumos en la ciudad de Córdoba dónde María Belén Espoz y Fabiana Martinez expondrían los resultados de las encuestas analizadas, también responderían preguntas, y explicarían las causas y consecuencias de dicho informe.
María Belen Espoz daría inicio con esta reunión informativa:
¿Con qué fin realizaron estos estudio?
Respondió a este interrogante María Belen Espoz comentando que lo hicieron pensando en el área de vacancia que yace en el campo de la comunicación hace al menos dos décadas, sobre cómo generar una instancia de producción empírica de datos fundamentales para comprender procesos y prácticas de consumos tanto culturales como tecnológico en Córdoba Capital, de forma particular y sobre todo en el contexto del COVID-19 lo cual dio una vuelta de brújula respecto al nivel de lectura que antes se podía tener respecto a este tipo de consumos.
¿Cuándo se aplicó dicho relevamiento y cuáles fueron las preguntas base?
Supo comentarnos que estos relevamientos fueron aplicados en septiembre del 2021 cuándo se estaba saliendo del contexto de pandemia, necesitando hacer preguntas interesadas sobre esa temática, teniendo una vez el bloque de equipamiento pensaron “¿Qué compraron los cordobeses en tiempo de pandemia?”, “¿Cuáles son las prácticas de internet que se dieron no sólo relevando ese contexto, sino también nuevos consumos que florecieron en diferentes plataformas de entretenimiento y prácticas culturales?”, y “¿Qué se había dejado de hacer en la pandemia?”
A lo cual dijo: “Este instrumento se aplicó en septiembre de 2021 cuando estábamos saliendo recién del contexto de pandemia”, agregó que era necesiario hacer preguntas que estuvieran interesadas sobre esa temática: “Entonces tuvimos el bloque de equipamientos y el instrumento de alguna manera nos permitía tener una cartografía amplia que permitiera relevar diferentes datos”, aclarando que su intención era generar hipótesis que permitan concretar a futuro diferentes proyectos de relevamiento tanto cuantitativos como cualitativos, dando fin a la respuesta: “lo cual nos dio hincapié en empezar de cero y tener un punto de partida para ver qué pasó con esas transformaciones desde el último relevamiento que se hizo en Córdoba en 1997”.
¿Quiénes participaron y cuál fue su hincapié?
María nos supo explicar “Fue integrado por 8 equipos de investigación consolidar” agregando que dicho instrumento tuvo la “colaboración de los integrantes de los equipos” organizados en torno “a 8 bloques” comentando que dichos bloques tendrían la tarea de llevar a cabo el relevamiento sobre el equipamiento tecnológico haciendo hincapié en la pregunta “¿Qué es lo que los cordobeses tienen hoy en su hogar, dónde lo ubican, y que consumo creció más?” Adhirió también que desde diferentes objetos y reflexiones se necesitaban recursos sobre el acceso de este tipo de datos que desde el 97 no se producen con significancia en el contexto cordobés: “Sí teníamos a nuestro alcance acceder a una mirada más nacional sobre la encuesta de consumos culturales de la nación, o del sistema de información de consumos culturales que surgió después” pero por otro lado mencionó que no podían saber y comprender específicamente para el área local cómo eran los consumos que venían realizándose en Córdoba y que eso fue una de las bases de dicho relevamiento.
¿Qué significa dicho instrumento para la Facultad de Ciencias de la Comunicación (FCC) , qué otras instituciones participaron y cómo se realizó?
“Creímos que esa apuesta en términos institucionales permitía volver a colocar a la Facultad de Ciencias de la Comunicación como una de las principales cabezas a la hora de pensar en una producción de datos empíricos” dijo María en torno a esa cuestión agregando también que se tuvo una rigurosidad atada a una mirada desde la perspectiva de la producción de conocimiento más que con datos generales, resolviendo el último interrogante María dijo: “a partir de la construcción de datos que pudimos realizar mediante una articulación con el Instituto de Estadísticas de la Facultad de Ciencias Económicas (FCE), que fue quien de alguna manera llevó adelante no sólo el diseño a mostrar, sino también el operativo de campo en el que participaron muchos de los becarios que están en esta charla presentes, es significativo y obviamente diferente a esos datos que se pueden producir no únicamente mediante encuestas telefónicas por consultoras privadas o públicas”, detallando así que se requería de otro tipo de elaboración, trabajo y reflexión que de alguna forma se concentrara no sólo en ese diseño de muestra que estuvo a cargo de la ya mencionados FCE y el Instituto de Estadísticas sino del instrumento de cómo se fue pensado el instrumento cuyos resultados demostrarían el día de hoy.
En dicha pregunta anterior supe investigar dentro del informe donde se detalla que en un proyecto de esta envergadura se requirió el compromiso y esfuerzo coordinados de la SECyT; el Instituto de Estudios en Comunicación, Expresiones y Tecnologías (IECET) y el Centro de Investigaciones en Periodismo y Comunicación “Héctor Toto Schmucler” (CIPeCo).
(Fuente Informe-sobre-CCyT-2022-web.pdf)
Fabiana Martinez nos presentaría en esta charla entonces algunos gráficos y realizaría una síntesis de los datos más representativos del relevamiento.
“Los portales de acceso se han complejizado mucho” inicia explicando Fabiana que primeramente debían saber cuál es la tecnología disponible en los hogares (equipamiento doméstico), adhiriendo que 2008 la nación empezó a medir qué tecnología tienen las personas (equipamiento personal; aquellos soportes digitales individuales que se caracterizan por su portabilidad), “con eso último vamos al campo de celular que hace tiempo está constantemente transformando los aspectos tecnológicos, también esta tecnología constituye las condiciones materiales sobre las que luego es posible la práctica de consumo, entonces desde ese punto de vista también hace falta considerarla”.
Comparó encuestas anteriores con el susodicho nuevo relevamiento: “En las encuestas nacionales de los consumos culturales del 2013 había un 9% de hogares en el 2018 había un 75% de hogares, y nosotros hoy encontramos que de aquí en adelante un 90% de las personas tienen algún tipo de conectividad ya sea del hogar, esta progresión sabíamos que se dio pero no que se dio de esta forma. “
Indagando también en los resultados sobre que tanto se conectan los cordobeses: “La conectividad en los hogares cordobeses es muy alta casi el 80% de los hogares cordobeses cuentan con algún tipo de conectividad, también medimos la conectividad de las personas lo cual está vinculado al uso de los celulares (conectividad de las personas 95%) este porcentaje es altísimo, casi todos los cordobeses están conectados a algo de alguna manera, siguiendo con el tema de las redes, las aplicaciones, la conectividad, ¿Cuáles fueron los resultados que nosotros obtuvimos cuando vimos esto? Voy a hacer como una reseña muy general”
Siguiendo con el relevamiento de el consumo de la web: “El consumo de internet por edades; del bloque de los 16 a los 44 (97, 100, 95) es el consumo cultural que está marcando la escena contemporánea lo cual es muy complejo, baja el consumo en los 45-59, y personalmente nos asombró que más del 70% de las personas encuestadas con más de 60 años utiliza internet así que aquí también pasa algo, las encuestas indican que el proceso de digitalización se inició en el grupo de los jóvenes alrededor del 2010”
Mostrando varios gráficos, uno de ellos contenía dos barras muy largas las cuales correspondían a televisión, televisión smart, y televisión clásica, “en general encontramos que hay más televisores que hogares” supo agregar, “lo cuál es un índice de multi-posesión” proseguiría, pues no sólo es importante que el equipamiento esté, sino detectar si hay más de una unidad, y cómo está distribuida en los hogares explica, haciendo hincapié en la conclusión de que las habitaciones de las casas de Córdoba están bastante equipadas lo cual también es el puntapié material para hablar de la personalización de los consumos. Había otra barra de muy alto porcentaje la cuál correspondía a los celulares, lo cual Fabiana exclamó; “587 casas encuestadas 822 celulares lo cual da 1,5 celular por persona, lo cual está más o menos acorde al promedio nacional, pero también contrariamente a la tele que uno lo puede pensar como un aparato compartido existe un protagonismo total del equipamiento personal”.
Tampoco se quedaron atrás demás consumos tecnológicos en su síntesis de resultados: “La segunda cosa que vimos es el equipamiento de computadoras, acá está discernido pero si uno compara tablets, notebook y computadora es el segundo equipamiento disponible, esa imagen pasada de la casa con una sola PC de escritorio vieja dónde los padres y niños peleaban por el uso de la única maquina, está totalmente modificada pues las casas ahora poseen más equipamiento”.
Y sin dejar de lado las tecnologías tecnologías en declive; como la consola de juegos, como el dvd, pero también tecnologías que no llegaron a tener un proceso de apropiación exitoso “como los lectores de libros que tienen una aparición del 3%” atestiguó.
Conclusión breve e inmediata sobre estos resultados
Cerrando con la charla Fabiana comentó: “Podríamos decir que en la cultura contemporánea de Córdoba los consumos principales están pasando por pantallas sea televisivas o celulares”.
Supe encontrar una breve explicación de su meta, resumida en el archivo del relevamiento que compartieron abiertamente: “En términos institucionales, la meta fue actualizar y potenciar el conocimiento y la capacidad de investigación de la Facultad en temas contemporáneos vinculados a medios de comunicación, en particular las tradiciones que vinculan al uso y consumo de tecnologías y el estado de las prácticas socio-culturales del presente”. (Fuente Informe-sobre-CCyT-2022-web.pdf página 5, parrafo 2)
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