Los músicos que circulan por las calles de la capital cordobesa, son cada vez mas.
Esta abundancia de artistas puede deberse a las normas que se rigen desde el año pasado, en donde dentro de las mismas la posibilidad de tocar en los colectivos resulta más accesible y tocar en la peatonal tiene sus lugares específicamente demarcado.
Trabajar en las calles y colectivos resulta para algunos un tanto oneroso y para otros una aventura que se mezcla entre sentimientos y códigos. La convocatoria de público es inestable, y muy pocas veces satisfactorias.
En nuestra peatonal y si tenemos la suerte en el colectivo, podemos encontrar diversos de estos artistas, desde bandas de folklore, violinistas, saxofonistas, guitarristas, etc. Que nada de improvisados tienen.
“se puede sobrevivir con la música y ganar, a veces hasta mas que una persona con un sueldo fijo, el único enemigo es uno mismo, si no salís por qué no te dan la obligación, no obtenes el dinero”, afirma Nicolás Smith, músico de peatonal y colectivos.
Para Nicolás los códigos con los que se manejan en la peatonal y en los colectivos son básicamente dirigirse con respeto, para que todos puedan trabajar, sobre todo en la horas pico de los días viernes y lunes. Todos tienen el derecho de mostrar su arte en las calles del centro, exceptuando la plaza san Martin, la colon y el paseo sobremonte en donde no tienen permiso de trabajar.
Las calles principales del centro de nuestra ciudad donde abundan los diversos artistas son rivera indarte, deán funes y 9 de julio entre otras.
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